Kisshomaru Ueshiba
Segundo Doshu
Antiguo Dojocho del Aikikai Hombu Dojo

Aikido: Su Espíritu y su Técnica.

Por Kisshomaru Ueshiba


Nota del editor: este artículo fue publicado originalmente en The Aikido, Vol. 23 nº 2 en 1986. Le damos las gracias al Doshu Moriteru Ueshiba y al cuartel general del Aikido mundial en Tokio por permitirnos su reproducción.
El 16 de marzo de 1986, Ueshiba Kisshomaru Doshu fue invitado para hablar de Aikido ante la 12va reunión general de la sociedad de artes marciales japonesas. Esta organización internacional y anglo parlante organiza reuniones y otros eventos especiales y los reporta en un boletín de noticias. Las actividades de esta sociedad están dedicadas a fomentar el correcto entendimiento de las metas y los propósitos de las artes marciales japonesas y sus caminos. El siguiente artículo fue adaptado del discurso de dos horas del Doshu.

El concepto de Ki en Aikido

En Aikido, el concepto de “ki” como se ha desarrollado a lo largo del tiempo aquí en Asia es muy importante. Hablamos de “extender nuestro ki” y por esto queremos decir que cada persona entrena para alcanzar una unidad de cuerpo y espíritu para concentrar el ser y así poder manifestar una forma de fuerza humanitaria.

font-family:Arial">Por ejemplo, cuando enfrentamos a nuestro compañero en el entrenamiento se espera que seamos capaces de usar irimi, movimientos de entrada. Esto no significa que hagamos una pausa, preguntándonos si estamos haciendo bien o no, o que dudemos o perdamos confianza al preocuparnos por lo que pasará. En cambio, nos movemos de manera positiva con el Principio de Entrar.

Estoy seguro que todos han experimentado la importancia de concentrar las energías en su propio entrenamiento e incluso en su vida diaria. Conocer a una persona particularmente famosa o poderosa puede ser tan impactante que nos encontramos capaces de mostrar solo una pequeña fracción de nuestro talento en el momento justo en que tenemos que dar lo mejor de nosotros mismos.

¿Qué significa todo esto en términos de los actuales movimientos del Aikido? A veces escuchamos a la gente describir el Aikido como “puramente defensivo” o dependiendo exclusivamente en un “go no sen” forma de técnica en la cual esperamos y actuamos solo como respuesta de los movimientos del otro. Siempre siento que aquel que dice este tipo de cosas se ha perdido de alguna manera la verdadera esencia del budo. En Aikido, cuando nos paramos frente a frente con nuestro compañero, no hay “ellos y nosotros” – ya somos una unidad. El ideal del Aikido representa un aire diferente de consciencia. Nuestro sentimiento debería ser el de estar alcanzando y abrazando al otro con anticipación. Por esta razón puedo decir que cuando me muevo alrededor de mi centro mi compañero también se mueve. De la misma manera debemos decir que cuando la otra persona se mueve acorde hace que yo me mueva alrededor de mi centro. Esta es la manera ideal en que podemos entender el ki en Aikido.
Un budo que es simplemente un “go no sen budo” o que es solamente un “uke no budo” no es realmente un budo. En la historia del budo japonés nunca ha habido un arte diseñado para obtener la victoria al estar contra una esquina o por estar acorralado. En cada caso la esencia es golpear y decidir el problema de victoria o la derrota de una manera activa. Por lo tanto en Aikido no nos sentamos y dejamos que nuestro compañero nos empuje aquí y allá, tampoco lo atacamos realmente. No hay victoria y no hay derrota. Acabamos con las distinciones de atacante y atacado. Los movimientos del Aikido traen a los dos en un único acorde.

Está claro que a menos que su centro esté firmemente establecido, enraizado con la tierra es imposible alcanzar los movimientos del Aikido. El estricto estilo de vida que ha sido históricamente asociado con el budo es una de las maneras de establecer esta firmeza necesaria del centro. Para ayudarnos a ser capaces de “extender el ki” en nosotros mismos, Aikido tiene el concepto de “kokyu ryoku”(poder de la respiración” y métodos diseñados para permitirnos aprender como exteriorizar este poder de la respiración. En oriente desde el pasado antiguo, videntes o filósofos han descrito los poderes de flujo del universo. Lao Tzu, Mo Tzu, Mencio y otros como ellos hablaban constantemente de “llenarse de ki”. En Aikido, nuestro concepto del “principio del ki” está basado en establecer una unidad entre el flujo cósmico de la tierra y el cielo con el flujo de nuestro centro individual, nuestro “kokyu ryoku”. Usamos kokyu rokyu yosei ho (llamado popularmente kokyu ho) como el ejercicio más básico diseñado para desarrollar potencia y unificación.

Este ideal técnico, en el cual los cuerpos de dos personas se vuelven un solo cuerpo unificado en movimiento armonioso, permite que uno lidie con dos o tres atacantes si llegara a dar el caso. Incluso, este tipo de movimiento siempre ha sido considerado como los verdaderos movimientos del Aikido.

Por supuesto no es sencillo para nadie, incluyéndome, moverse de esta manera cuando se lidia con un número de atacantes. Sin embargo si el principio de unidad con el otro puede ser profundamente entendido y luego realizado por el cuerpo por medio del entrenamiento shugyo, esta habilidad se desarrollará. Todo esto está íntimamente ligado con el concepto del Aikido y el Principio del Ki.