T.K. Chiba
8º Dan, Shihan
Presidente del Comité de Enseñanza - Birankai International


Escogiendo compañeros

Por T.K. Chiba, 8° Dan

Siempre es entretenido trabajar con un compañero que usted conoce y que lo comprende. El o ella puede ser cooperativo e incluso ayudarlo con un problema en particular en algún punto del entrenamiento. Por lo tanto es natural buscar compañeros de su mismo nivel.

Sin embargo, si quiere hacer progresos en el entrenamiento, particularmente en el desarrollo de una base física sólida, y movimientos dinámicos y flexibles, una práctica ideal debería incluir diferentes elementos. Teniendo esto en cuenta, algunos conceptos comúnmente entendidos dentro de las artes marciales japoneses deben ser cuidadosamente considerados.

Primero, usted debería practicar con compañeros que entrenan a un nivel más avanzado. En este entrenamiento, mantenga la mente abierta a las características individuales de su compañero, que varían de persona a persona. Entrene los ojos a las diversas expresiones del arte y las razones detrás de ellas, como el sexo, la edad, el peso, la altura, la mentalidad, la personalidad, la nacionalidad, la historia de entrenamiento y la condición física. Cultive sus poderes de observación. Practique y aplique su técnica con el mayor esfuerzo, para que pueda entender sus propias limitaciones y pueda aprender a mejorarlas. (Si no sabe cuáles son sus limitaciones no puede trabajar en ellas). Aprenda ukemi que sea aplicable a los diferentes estilos de ejecución.

Segundo, practique con compañeros que estén a su mismo nivel. Aplique lo que ha aprendido y confirme el proceso de aprendizaje. Trate de ver sus propios problemas y debilidades a cualquier nivel ya que pueden verse reflejados en sus compañeros. Observe de cerca cuando, en su mismo nivel, superan un problema en particular y trabaje en descubrir como los han superado. Este proceso de superación de problemas se refiere no solo a problemas con la técnica, pero especialmente a descubrimientos en una dimensión más alta de consciencia física.
Tercero, practique con compañeros que estén en un nivel menos avanzado que el suyo. Confirme su comprensión de las técnicas básicas y aplíquelas con el mínimo esfuerzo. Aprenda a controlarse y sin embargo realizar la técnica efectivamente. Practique especialmente con principiantes que no tengan movimientos preconcebidos, para que pueda estudiar la funcionalidad y la precisión del movimiento. En las tres guías básicas de entrenamiento, antes mencionadas, mantenga una actitud de flexibilidad. Entrene con personas que sean más grandes que usted en tamaño, altura, peso, etc., con aquellos que son más o menos de su mismo tamaño y con aquellos que son más pequeños que usted.

Por sobre todo, tome la oportunidad de volver a tener la mente del principiante.

Para aplicar apropiadamente los conceptos expuestos anteriormente, yo generalmente conduzco las clases para que los estudiantes puedan cambiar de compañeros frecuentemente, al menos dos veces en la misma técnica. Yo considero que es deseable que los estudiantes practiquen, en la medida de lo posible con cada persona presente en el tatami en una clase. He oído de dojos donde le compañero es el mismo y está establecido antes de la clase. Esta costumbre refleja la ignorancia del instructor.

Generalmente hay dos formas de entrenamiento en las cuales las directrices aquí explicadas son aplicables. La primera forma es cuando usted recibe instrucción de un maestro, por ejemplo en una clase programada. La segunda forma de entrenamiento es la práctica libre. En la práctica libre hay dos elementos: trabajar con alguien o practicar solo, sin compañero. Practicar solo, sin compañero, aunque valioso, especialmente en el estudio de las armas, está por fuera del alcance de este ensayo en específico. Normalmente la práctica libre ocurre al final de la clase, en los últimos 10 minutos más o menos. El propósito es reconfirmar inmediatamente lo que se ha enseñado en la clase.

Sin embargo la práctica libre no esta limitada a un tiempo corto dado en una clase, pero debe incluir una parte del entrenamiento que se tenga por fuera de los horarios de clase. Sin duda, un excelente aikidoka es aquel que ha usado la práctica libre lo mas posible, como una manera para entrenar tanto con otros, como solo. Esta iniciativa es la que veo que falta en los estudiantes americanos. Cuando yo era uchi deshi en Hombu dojo, siempre había algunos estudiantes que de quedaban después de las clases en el día de práctica libre. (Esto causaba considerables problemas para el uchi deshi que había trabajado todo el día y estaba exhausto pero que no podía descansar hasta que todos los miembros hubieran terminado su entrenamiento. El uchi deshi debía tener la habilidad de hacer una siesta de 10 o 15 minutos, con el gi puesto, tomando la oportunidad cuando fuera posible para poder sobrevivir.)

No es mi intención afirmar la importancia del entrenamiento vigoroso, sin embargo, la mentalidad del cuerpo estudiantil en general se limita al entrenamiento con instrucción únicamente. Espero que la información anterior les de algunas luces para su futuro entrenamiento.